Cuando llega la época de les Verges, significa que podemos comenzar a degustar los bunyols. Y es que desde mediados de octubre Mallorca se llena de un aroma tentador gracias a estos pequeños bocados dorados y esponjosos, una delicia que hace la boca agua, y que puedes disfrutarlos en la comodidad de tu hogar. En este artículo, nos sumergiremos en la exquisita tradición de los bunyols, explorando en detalle cómo puedes recrear estos deliciosos tesoros culinarios por ti mismo para no tener que esperar hasta el año que viene.
El encanto de los bunyols mallorquines
Los bunyols son una verdadera joya de la cocina mallorquina, y su popularidad se dispara especialmente durante las festividades de les Verges, aunque hay algunas personas que los comen durante todo el invierno. Con su dorada y crujiente capa exterior y su interior suave y esponjoso, es difícil resistirse a su encanto. Ya sea acompañados de un chocolate caliente, como postre en una comida festiva o simplemente como un capricho dulce, los bunyols son un manjar que se ha ganado un lugar especial en los corazones de los mallorquines. Hoy te daremos las claves para recrearlos en casa de manera sencilla.
Ingredientes esenciales:
- Harina: Como la base de esta receta, la harina, preferiblemente la tradicional de Harinas de Mallorca, agrega su característico sabor y textura a los bunyols. Asegúrate de usar una harina fresca y de calidad para obtener los mejores resultados.
- Levadura: La levadura es la clave para esa esponjosidad característica de los bunyols. Asegúrate de que esté activa y fresca.
- Azúcar: El azúcar no solo endulza los bunyols, sino que también les da su característico color dorado cuando se fríen.
Otros ingredientes comunes son la sal, la ralladura de limón o naranja y, en algunas recetas, anís o licor.
Receta:
- Preparación de la masa: Mezcla la harina, la levadura, el azúcar y otros ingredientes secos en un tazón grande. Agrega los ingredientes líquidos y mezcla hasta obtener una masa suave.
- Levantar la masa: Cubre la masa y déjala reposar en un lugar cálido hasta que duplique su tamaño.
- Formación de los bunyols: Con la masa lista, forma pequeñas bolas y fríelas en aceite caliente hasta que estén doradas y crujientes.
- Disfrutar: Ahora queda el mejor paso: servir tus bunyols calientes, espolvoreados con azúcar glas.
Los secretos de Harinas de Mallorca para unos bunyols perfectos:
La temperatura del aceite es clave. Asegúrate de que esté lo suficientemente caliente para freír los bunyols de manera uniforme, pero no demasiado caliente para que no se doren demasiado rápido. Además, si deseas una versión más saludable, puedes hornear los bunyols en lugar de freírlos o hacerlos en la AirFryer. Obtendrás un resultado igualmente delicioso.
Puedes personalizar tus bunyols añadiendo trocitos de chocolate, pasas o incluso frutas confitadas a la masa antes de freírlos. Además, puedes añadir el relleno que prefieras pinchándolos y utilizando una manga pastelera.
Como ves, la temporada de bunyols es la ocasión perfecta para explorar la tradición culinaria de Mallorca desde la comodidad de tu hogar. Con ingredientes simples y pasos sencillos, puedes deleitarte con estos deliciosos bocados en cualquier época del año. Así que ¡manos a la masa y a disfrutar!